Una de las enfermedades que afecta a mayor número de personas en todo el mundo es la depresión. Se estima que cerca de 350 millones de personas la padecen, según datos de la OMS (Organización Mundial de la Salud) de las que entre un 15 y el 20% son personas mayores de 65 años.
La depresión en los mayores conlleva numerosos cambios, tanto físicos, psíquicos o emocionales, cuyos síntomas no debemos pasar por alto ya que pueden ser el inicio de este trastorno. Saber identificarlos a tiempo es ganar terreno a la enfermedad y poner soluciones tempranas.
En este sentido, disfrutar de una vejez feliz es sinónimo de bienestar y una vida saludable para la que es necesario alejar, entre otras, la depresión. Adoptando una serie de hábitos diarios con los mayores, podremos ayudarles a prevenir o reducir los efectos de este trastorno mental y mejorar así su calidad de vida. ¿Cómo podemos hacerlo?
Consejos prácticos para prevenir o evitar la depresión en mayores
- Apoyo y comprensión: para la persona que sufre depresión es muy importante sentir el calor de su entorno familiar más cercano. Entender que les pasa y brindar todo el apoyo necesario son esenciales para paliar sus efectos o prevenirlos en su defecto. Los mayores, son más vulnerables. Dedicarles tiempo, afecto, cariño y comprensión es fundamental para que se sientan bien y dejen a un lado la tristeza y la sustituyan por ratitos de felicidad.
- Evitar la soledad: soledad y depresión casi siempre van unidas. Es uno de los principales síntomas de quienes la padecen, ese sentimiento de soledad. Son muchos los adultos mayores que viven solos y pasan mucho tiempo sin compañía, por eso es importante visitarlos con frecuencia y realizar cualquier actividad con ellos, haciendo que se mantengan activos y se relacionen con otras personas.
- Ejercicio físico: además de ser beneficioso para estar en forma y prevenir enfermedades cardiovasculares, el ejercicio físico ayuda a mejorar el estado de ánimo. Salir a caminar dos o tres veces en semana y hacerlo en compañía, es de las mejores terapias para “curar” los estados de tristeza y sentirnos mejor.
- Mantener las relaciones sociales: Para el adulto mayor es muy beneficioso para su salud emocional poder relacionarse con otras personas de su edad, compartir experiencias, recuerdos, aficiones… Es tan importante como las relaciones familiares y debemos hacer lo posible para que estos puedan pasar ratos con personas de su misma edad.
- Dieta saludable y equilibrada: la dieta cumple también un papel importante en la salud de los mayores, tanto a nivel físico como emocional. Ingerir los nutrientes necesarios y llevar una dieta sana y equilibrada es fundamental para conservar un buen estado de salud y prevenir enfermedades.
- Mente activa: al igual que hacer ejercicio físico es bueno para el cuerpo, entrenar nuestro cerebro también es importante para que goce de buena salud. Para ello es necesario ejercitarlo con actividades que lo ejerciten, como pueden ser los juegos de mesa, crucigramas, lógica, juegos de memoria… todos ellos destinados al entretenimiento y bienestar del adulto mayor.
La depresión en los mayores, sobre todo en edades avanzadas, sigue siendo un problema en nuestra sociedad. Conseguir un equilibrio emocional en estas personas depende mucho de sus circunstancias pero, sobre todo, de evitar la cada vez más, soledad.
Y es que, con el envejecimiento de la población en aumento y, el consiguiente incremento de personas que llegadas a una edad viven solas, debemos tomar medidas para erradicar este problema que se vislumbra ya como una lacra en los países desarrollados.